Repasamos las funciones de un enólogo y la historia de esta profesión. Analizamos las diferencias más significativas entre su trabajo y el del sumiller.
Qué hace un enólogo en la bodega
A la hora de enunciar cuáles son las funciones de un enólogo debemos analizar antes el origen de esta profesión, así como otros factores de vital importancia para que te resulte más fácil entender por qué su labor es imprescindible en cualquier bodega.
¿Qué es un enólogo?
Es el profesional que se encarga de analizar las técnicas de cultivo de la viña correspondiente, el proceso de elaboración y crianza del vino y su correcto almacenaje. Además, según indica la ley 50 de 1998, también puede llevar a cabo acciones relacionadas con las medidas sanitarias y las técnicas vinculadas a todos los procesos arriba mencionados.
En 2002 se les añadió a estas labores la de la responsabilidad técnica de la bodega en lo que respecta a la elaboración del vino. Igualmente, el enólogo también puede encargarse de la investigación y del estudio de las tendencias más renovadoras para mejorar el proceso de creación del vino.
Historia de la profesión
Nace en la antigua Grecia y se fue desarrollando de manera casi amateur durante varios siglos. Podría confirmarse que Pasteur fue el primer enólogo moderno al analizar el efecto de las partículas de oxígeno en la fermentación. Sus estudios facilitaron la correcta conservación del vino. Ya a mediados del siglo XX se reconoció legalmente como profesión, siendo hoy en día una carrera universitaria.

¿Qué conocimientos debe tener un enólogo?
Si piensas que ser enólogo se basa exclusivamente en probar vino ¡te equivocas! Un buen profesional debe atesorar nociones de física, matemáticas, química orgánica y bioquímica. También debe dominar la microbiología, la fisiología, la tecnología relacionada con la producción, los procesos conectados con la industria vinícola, la genética, el marketing, la estadística, el análisis sensorial e instrumental y la comercialización.
Como ves, la formación de este tipo de profesionales ha de ser tan completa como exacta para conseguir los mejores resultados.
¿Qué funciones desempeña en la bodega?
Entre las funciones más sobresalientes de un enólogo podríamos destacar las siguientes:
- Controlar que la producción del mosto y su posterior fermentación sean las debidas llevando a cabo análisis diversos de las muestras obtenidas.
- Coordinar cuándo se deben llevar a cabo las distintas labores de la bodega como el trasiego, la clarificación, la conservación y la estabilización.
- Controlar que el proceso de elaboración y crianza del vino es el correcto.
- Analizar cómo debe ser la producción para amoldarse a las necesidades de la bodega.
Qué hace un enólogo en la bodega
Adoptar decisiones relacionadas con la compra de maquinaria, utillaje y tecnología y todo lo necesario para que el vino tenga la máxima calidad posible.
Estudiar cómo es posible mejorar las condiciones sanitarias y tecnológicas de la bodega para conseguir que el vino sea el fiel reflejo de la filosofía de la bodega. Fomentar la viticultura sostenible con el medio ambiente.
Asegurar que se cumplen las condiciones del Consejo Regulador correspondiente en lo que a las condiciones de la bodega, a la elaboración y etiquetado del vino y al tipo de uva utilizado se refiere.
Diseñar con la propiedad de la bodega la plantación de nuevos viñedos o reducir la extensión de los mismos
Diseñar con la propiedad y el equipo comercial y de marketing la planificación de los vinos desde la viña.
Programar la cantidad de materia prima requerida para mejorar los niveles de calidad del vino.
Dirigir todas las actividades del laboratorio en cuanto a los análisis organolépticos, químicos, físicos y microbiológicos.
Colaborar con los departamentos comerciales y marketing para la mejor comercialización de los vinos. Asistir a ferias comerciales, recibir a clientes en Bodega, realizar las notas de cata, estudiar la competencia,…
Formar parte de los diferentes Comités de la Empresa, entre ellos el Comité de Dirección, el de Coordinación y Planificación de la Producción, el de Seguridad Alimentaria y el de Innovación.

En definitiva, el enólogo es el responsable de controlar todo el proceso que lleva al mosto a convertirse en un tipo de vino determinado. Su conexión con los distintos departamentos de la bodega resulta determinante para que el proceso sea natural y esté adaptado a las exigencias de cada bodega.
¿En qué se diferencian un enólogo y un sumiller?
En ocasiones, se confunde la labor de estos profesionales. Para que te sea más fácil distinguirlos y yéndonos a los extremos, podríamos partir sus profesiones y convenir que el papel del enólogo termina cuando el vino se embotella. La del sumiller comienza, precisamente, en ese momento.
Si el enólogo es un asesor que analiza el proceso de creación de un vino, el sumiller se encarga de probar el vino, de diseñar la carta de vinos de un restaurante y de asesorar al cliente sobre la opción más apropiada para acompañar la comida que acaba de pedir.
Además, el sumiller no tiene por qué dedicarse exclusivamente al vino, puesto que también puede serlo de licores de alta graduación o de cerveza, entre otras opciones.
Esperamos haberte aclarado cuáles son las funciones de un enólogo y por qué su labor es absolutamente imprescindible para que una bodega consiga alcanzar todos sus objetivos. Una exigencia que condiciona, sin duda, a que esta profesión sea estudiada en un centro especializado con todas las garantías.
El enólogo debe tener la capacidad de afrontar cualquier actividad con la solvencia requerida, así como la mejor aptitud posible a fin de conseguir los mejores vinos dentro de las diferentes categorías o estilos que elabore.